A la edad de 18 años conocí a mi esposo que ya laboraba para los medios de comunicación de la Diocesis de Matagalpa, actualmente tenemos 20 años de matrimonio y dos hijas: Wendy Mariela y Jessel Gabriela Artola Pérez.
Mi esposo siempre ha sido un hombre fiel a sus principios católicos y pues en ningún momento iba a abandonar a su Iglesia, a Monseñor Rolando José Álvarez y al resto de compañeros de trabajo que por mucho tiempo lo acompañaron en esa labor tan importante, como es informar y evangelizar a través de los medios de comunicación, esta es la razón principal por la que es declarado traidor a la patria.
El día 11 de Diciembre del 2022, cuando mi esposo fue detenido de forma injusta, vivimos momentos de mucho dolor, incertidumbre y tristeza en nuestro hogar, sobre todo para nuestros padres y nuestras hijas. Desde ese día no tuvimos tranquilidad, porque personalmente era perseguida por personas afines al gobierno, pero mantuvimos siempre firme nuestra Fe, el Rezo del Santo Rosario fue nuestro consuelo y esperanza.
El 09 de Febrero del año 2023, fue un gran día para nosotros cuando fueron liberados porque aunque sabía que no estaríamos juntos, estaban en libertad mi esposo y todas las personas detenidas injustamente desde el año 2018, aunque fue muy triste que Monseñor Rolando José en esa ocasión no pudo recobrar su libertad junto al resto de personas. Dios y nuestra Madre Santísima no nos abandonan, siempre nos cuidan, nos protegen y nos hacen muchos milagros. Nuestro milagro especial es que nuestra familia ahora está unida, y por gracia de Dios viviendo actualmente en Traverse City.
Agradezco personalmente a la DIOCESIS DE GAYLORD por ayudarnos a reunificar a nuestra familia y al resto de familias de los laicos comprometidos, al obispo Jeffry Walsh por permitir venir a su diocesis, por brindarnos todo su apoyo y amistad, al padre Wayne Dziekan por tanto bien que ha hecho a nuestra familia, por su paciencia y generosidad para con nosotros, a tantas personas y familias que nos han apoyado de la Parroquia San Antonio de Padua de Mancelona, de la Capilla de Guadalupe, a la Parroquia San Felipe Neri de Empire, de Kalkaska y de toda la Diocesis, . Hemos sido muy bendecidos, nos sentimos en familia aquí en Traverse City por el recibimiento acogedor de muchas personas y por brindarnos su amistad y ayuda cuando más lo necesitamos, poco a poco vamos saliendo adelante. Dios y la Virgen Santísima les recompensen tanto bien que hacen por nosotros.
